- Planea invertir 46.000 millones de euros en la construcción de 5 centrales
- Esta semana se cerrará posiblemente el acuerdo en Londres
- Richard Branson pide a Barack Obama que apoye la construcción de reactores de cuarta generación
China aspira a relanzar la energía nuclear en el Reino Unido con la
construcción de cinco reactores y una inversión total de 35.000 millones
de libras (unos 46.000 millones de euros). Según ha revelado el diario 'The Guardian', las conversaciones entre Londres y Beijing están muy avanzadas y podrían cerrarse esta misma semana en una reunión de alto nivel, durante la celebración de los Juegos.
El Gobierno de David Cameron propuso relanzar la energía nuclear en
octubre del 2010 con la construcción de ocho nuevos reactores, a sumar
los 16 que funcionan en la actualidad y que suministran un 16% de las
necesidades energéticas del país.
El accidente de Fukushima
supuso sin embargo un parón en los planes de Cameron, confirmado el
pasado mes de mayo con la retirada de las compañías alemanas RWE y E.ON
en la construcción de nuevos reactores, alegando "problemas
financieros". La implicación de la compañía francesa EDF ha quedado
también en entredicho tras el relevo de poder en el Elíseo.
Reactores de cuarta generación
El camino ha quedado pues despejado para China, que opera sus propias
centrales nucleares desde 1994 y que se ha puesto a la cabeza mundial
en investigación de reactores de cuarta generación (4G), que utilizan
como combustible uranio empobrecido en lugar de enriquecido, bajo los
auspicios de Bill Gates y su brazo nuclear, TerraPower.
Otro multimillonario que parece decidido a impulsar el 'revival' nuclear es Richard Branson. Según 'The Guardian',
el fundador del grupo Virgin ha pedido mantener un encuentro al
presidente norteamericano, Barack Obama, y al secretario de Energía,
Steven Chu, para hablar precisamente de los reactores de cuarta
generación.
"Obviamente, necesitamos encontrar con urgencia una manera limpia y efectiva
de suministrar energía limpia para no contribuir al calentamiento del
planeta", ha declarado Richard Branson, en un movimiento que algunos
anticipan como el presagio de su salto a la energía nuclear.
Entre tanto, la Corporación Nacional China de Energía Nuclear (CNNPC)
ha confirmado su intención de invertir en Gran Bretaña, en alianza con
el Instituto de Diseño e Investigación Nuclear de Shanghai (SNERDI). Una amplia delegación china visitará esta semana Londres para mantener una reunión del más alto nivel con el Departamento de Energía y Cambio Climático (DECC) y avanzar en los planes.
La inversión inicial sería de al menos 22.000 millones de euros para la construcción de nuevos reactores en dos centrales
ya existentes en Wylfa (Gales) y Oldbury (Gloucestershire). Los
inversores chinos están también interesados en otras tres ubicaciones:
Bradwell (Essex), Heysham (Lancashire) y Hartleppol (condado de Durham).
Críticas de los ecologistas
El órdago nuclear chino en el Reino Unido ha sido criticado entre tanto por Greenpeace por razones ambientales y económicas. "Estamos ante un signo de desesperación por parte del Gobierno británico", ha declarado Doug Parr, director científico del grupo ecologista.
"Los inversores nucleares chinos tienen el respaldo de estado, lo que
podría ayudarles a resolver los colosales costes financieros de la
construcción en el Reino Unido", asegura Parr. "Pero eso significaría
que el dinero de los contribuyentes británicos iría finalmente a parar
al Gobierno chino, en vez de a Francia".
Carlos Fresneda | Londres